Los coches imaginados por el "commendatore" Enzo Ferrari siguen siendo indiscutiblemente los más prestigiosos del mundo. Ninguna otra marca ejerce, en todo el planeta, una tan intensa y notable fascinación. Símbolos de hazañas excepcionales y de creatividad estética, los bellos autos de Maranello han atravesado las épocas, ignorando las modas y desdeñado las crisis económicas, brillando en los más populares circuitos. Han obtenido los títulos de campeones del mundo y redactado las más bellas páginas de la historia del deporte automovilístico.