No hay personaje más controversial de la historia argentina del siglo XIX que Juan Manuel de Rosas. En su tiempo, dividió las aguas. En las décadas siguientes, fue objeto de ataques furibundos (y algunas tímidas defensas), pero su persona y su gobierno continuaron generando arduas disputas a lo largo del siglo XX y XXI. El uso político de estas disputas llevó a una simplificación del fenómeno rosista. Y su gran déficit era previsible: no haber respondido a los dilemas más complejos que planteaba su gobierno. ¿Cómo construyó Rosas su liderazgo político y consiguió el apoyo de los sectores populares? ¿Cuáles fueron sus alianzas y cómo cambiaron a lo largo de dos décadas en el poder? ¿Qué aprovechó de las instituciones heredadas y que legó al país que surge tras la batalla de Caseros? ¿Habría sido posible la Argentina del crecimiento económico y la organización nacional sin su gobierno?