Hay una generación, la de los nacidos alrededor de 1945, cuyo recorrido pocos contaron. Son los hijos de los inmigrantes que escaparon al horror de las guerras mundiales, hombres y mujeres que recibieron como herencia la certeza de que el trabajo, el esfuerzo y la voluntad son el único camino para salir adelante. Sin embargo, muchos eligieron otros rumbos. Se permitieron dudar de los valores del matrimonio tradicional, del capitalismo, de la religión, incluso de sus padres. A esa generación, la de los denominados 223zarpados224, alude el autor de esta novela que representa el testimonio de una: la de la década del 60, un tiempo y una manera de entender el mundo. Con su característico estilo irreverente y su agudeza intelectual, Rolando Hanglin recrea las historias de amor, sexo, divorcio, amistad y política de una época que comienza a quedar lejana, para dar cuenta de una forma de vivir de la que fue testigo, protagonista y, a partir de esta novela excepcional, uno de los últimos 226quizás el más zarpado226 de sus escribas.