El fin del Océano Pacífico es quizá la más ambiciosa novela de Tomás González por su extensión; su estructura y la atención plena a la escritura. A través de un hombre enfermo y de un territorio montaraz y selvático; vamos descubriendo el alma de sus personajes. Una madre poderosa; dominante; y una tía llena de dulzura; las dos casi centenarias que se atenazaron en la vida después de que la primera quedara viuda para sacar adelante una prole de muchachos y muchachas que crecieron en la libertad del campo y quienes; ya mayores; son los testigos y actores del tiempo que les tocó en suerte. Ignacio; el hijo mayor; y protagonista de esta entrañable y dura novela; es una suerte de oráculo que nos cuenta el destino de su familia; a dos horas en lancha de Bahía Solano; esa ensenada que es la segunda más profunda de la tierra; en donde el mar y el cielo tienen por momentos el color de las aletas de los tiburones puntablanca y la selva irrumpe en el horizonte con el verdor profundo y oscuro de la serranía del Baudó.