El paso de los años, la soledad como paisaje y destino, la violencia del mundo y la violencia del hombre en un juego de sombras que se reconocen: tercos como animalesfabulosos nos sostenemos en la precariedad de nuestra existencia, elaborando una y otra vez la trampa certera de la felicidad, del amor, de la juventud hecha de sueños que sobreviven a todo naufragio. A través de los cuentos de éste libro y con una prosa contundente y certera, María de las Mercedes Abdelnur pone en evidencia nuestra intemperie en la absurda y grandiosa fiesta de la vida.