Prudence está segura de que nadie puede hacer nada en el mundo mejor que ella. Especialmente el flojo e irresponsable de su compañero de Biología: Quint. Y el universo parece estar de acuerdo con ella, porque luego de un hilarante accidente despierta con la capacidad de provocar karma al instante a las personas y comienza a castigar toda mala acción a su alrededor: de actos de vandalismo a chismes maliciosos. Todos reciben su merecido. Todos... excepto Quint. Que parece ser inmune a sus poderes.