Una tierna historia que ensalza el mundo visual y la imaginación. Desde que es pescador, y de eso hace ya muchos años, Patano lleva a su hija Limea una caracola. A la niña, ciega de nacimiento, le encanta apoyar su oreja en ellas y acunarse con el sonido del mar. Hasta que un día su padre trae una caracola mágica... y Limea comienza a escuchar el sonido de los colores.