1984 es, sin dudas, la gran novela distópica del siglo XX. Publicada por primera vez en 1949, la historia está escenificada en un estado dominado por un gobierno totalitario que, a través de la mirada del Hermano Mayor, vigila permanentemente a sus ciudadanos. Su autor, George Orwell (seudónimo del ciudadano británico Eric Arthur Blair), demuestra en estas páginas (como ya lo hiciera en su famosa novela Rebelión en la granja, publicada cuatro años antes) su enfático rechazo a los régimenes totalitarios, como el stalinismo y el nazismo, que habían asolado a parte del mundo en las décadas anteriores. "Mi última novela no constituye un ataque contra el socialismo o el Partido Laborista inglés, al que adhiero", sostenía Orwell poco tiempo después de la edición del libro, y aclaraba: "No creo que el tipo de sociedad que describo vaya a suceder forzosamente, pero lo que sí creo (si se tiene en cuenta que el libro es una sátira) es que puede ocurrir algo parecido. También creo que las ideas totalitarias han echado raíces en los cerebros de los intelectuales en todas partes del mundo y he intentado llevar estas ideas hasta sus lógicas consecuencias".